La preocupación ambiental es un tema que perdurará en el tiempo, en el que se involucra la sustentabilidad corporativa. ¡Entérate!
Actualmente, todo parece ser sustentable, ecofriendly, cero neto, comprometido con el planeta y un largo etcétera que trata de dar opciones para disminuir el calentamiento global y colaborar con el desarrollo sostenible. En ese sentido, es necesario entender otros conceptos como qué es la sustentabilidad corporativa.
A continuación te decimos de qué va, por qué es relevante y cómo integrarla a un modelo de negocios.
¿Qué es la sustentabilidad corporativa?
La sustentabilidad corporativa es la forma en la que una empresa u organización ajusta su comportamiento con el pleno entendimiento del contexto ambiental y social en el que opera.
Al tener en cuenta el contexto de sus operaciones, la sustentabilidad corporativa trabaja con las limitaciones, demandas y requisitos del contexto social y ambiental en donde labora para asegurar un impacto neutro sobre estos.
Cabe destacar que este concepto no es rígido ni estricto, por el contrario, se adapta a las circunstancias socioambientales teniendo como objetivo máximo causar el menor daño o impacto social y ambiental.
Si bien la sustentabilidad corporativa reconoce que el crecimiento y la rentabilidad corporativos son importantes, también requiere que la corporación persiga objetivos sociales, específicamente los relacionados con el desarrollo sostenible: protección ambiental, justicia social, equidad y desarrollo económico.
En esta primera aproximación quedan varias interrogantes como entender qué pilares ayudan a construir el concepto, así como hacerlo operativo. A continuación, te explicamos.
Pilares teóricos de la sustentabilidad corporativa
Después de la definición de sustentabilidad corporativa es necesario profundizar sobre qué elementos la constituyen. Uno de ellos ya se ha hecho evidente: el desarrollo sostenible, pero existen otros pilares como la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) y teoría del capitalismo de las partes interesadas.
A continuación, te compartimos brevemente sobre cada uno de ellos y su relevancia para la sustentabilidad corporativa.
Desarrollo sostenible
De acuerdo con el Informe Brundtland, el desarrollo sostenible permite satisfacer «las necesidades del presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades».
Además, sus ejes más importantes son: lo económico, social y ambiental. Elementos cruciales para la sustentabilidad corporativa. El desarrollo sostenible se sustenta en:
- Económico: Debe estar basado sólidamente, tanto en el capital humano como ambiental, y tener una distribución adecuada del crecimiento económico para crear empleos justos.
- Social: El desarrollo económico y social deben reforzarse mutuamente. Debe abordar la pobreza en el mundo, especialmente en los países en desarrollo.
- Ambiental: Es importante considerar este elemento para tomar decisiones económicas y sociales, tomando en cuenta que el medio ambiente está limitado por los recursos naturales disponibles y el uso que se les otorga.
La contribución del desarrollo sustentabilidad corporativa es doble:
- Establece las áreas en las que las empresas deben centrarse: desempeño ambiental, social y económico.
- Proporciona un objetivo social común para que las corporaciones, los gobiernos y la sociedad civil trabajen hacia la sostenibilidad ecológica, social y económica.
Si bien el desarrollo sostenible es una meta global, no proporciona los argumentos necesarios de por qué las empresas deberían preocuparse por estos temas. Dichos argumentos provienen de la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) y la teoría del capitalismo de las partes interesadas.
Responsabilidad Social Empresarial
La Responsabilidad Social Empresarial (RSE) es la preocupación de una empresa en lo económico, lo social y lo ambiental sin importar los productos o servicios que ofrezca. Esta visión de negocios integra «el respeto por las personas, los valores éticos, la comunidad y el medioambiente con la gestión misma de la empresa».
Hay que tener en cuenta que todas las actividades empresariales generan un impacto. Estos pueden ser positivos o negativos, en el caso de los primeros, el empleo bien remunerado es un impacto positivo. En cambio, la explotación laboral como el trabajo forzoso es un impacto negativo.
La RSE contribuye a la sustentabilidad corporativa al proporcionar argumentos éticos sobre por qué los gerentes corporativos deben trabajar hacia el desarrollo sostenible.
Es decir, si la sociedad en general cree en el desarrollo sostenible, las corporaciones tienen la obligación ética de ayudar a la sociedad a avanzar hacia ese desarrollo. En ese sentido, la RSE otorga el argumento y empuje ético necesario para lograrlo.
Capitalismo de las partes interesadas
El capitalismo de las partes interesadas fue propuesto por Edward Freeman en su libro Gestión estratégica: un enfoque de las partes interesadas (1984). Freeman definió a una parte interesada como:
Cualquier grupo o individuo que puede afectar o se ve afectado por el logro de los objetivos de la organización.
Edward Freeman, filósofo americano y profesor de administración empresarial en la Universidad de Virginia.
El capitalismo de los stakeholders o partes interesadas resalta el interés de los consumidores, proveedores, inversionistas, entre otros, en el modelo de negocio con el que operan las empresas y si este es sostenible o no.
Para que se desarrolle el capitalismo de las partes interesadas es necesario identificarlas y después generar estrategias para tratar con ellas. Lo cual genera un enorme desafío, ya que en muchas ocasiones pueden tener diferentes objetivos, prioridades y demandas.
La contribución de la teoría de las partes interesadas a la sustentabilidad corporativa radica en la argumentación sobre el porqué las empresas deberían trabajar hacia el desarrollo sostenible.
Bajo este entendido, el desarrollo sostenible, la RSE y el capitalismo de las partes interesadas son la base y los argumentos éticos y económicos de la sustentabilidad corporativa. Ahora bien… ¿Cómo se lleva esto a la práctica?
Gestión de la sustentabilidad corporativa
La sustentabilidad corporativa es una herramienta que funciona de manera transversal, es decir, a traviesa a todas las operaciones de la empresa desde la cadena de suministro hasta sus consumidores. Sin embargo, hay elementos clave de gestión que se deben considerar:
- Centro del negocio: La sustentabilidad corporativa no es un departamento de la empresa o un elemento adicional, sino se debe gestionar desde el centro del modelo de negocio. Un propósito empresarial claro para todas las partes interesadas.
- Dependencias comerciales fundamentales: Las cadenas de suministro, la logística, los recursos, energía, una fuerza laboral y clientes son grupos de interés con los que se debe trabajar la sustentabilidad corporativa y, en su caso, orientar para alinearse a los objetivos de la empresa.
- Objetivos de rendimiento a la empresa: Estos no solo se deben orientar a términos financieros y de ganancia, sino considerar los impactos sociales y ambientales.
- Verificación: A realizarse por terceros independientes, especialmente a través de auditorías que orienten e identifiquen sobre las áreas de oportunidad de las empresas para mejorar la sustentabilidad corporativa.
Sino queda clara la importancia de la sustentabilidad corporativa. A continuación, te decimos algunos beneficios, tanto para las propias empresas como para la sociedad.
Beneficios
Queda claro que la sustentabilidad corporativa busca ajustar su comportamiento con el pleno entendimiento del contexto ambiental y social en el que opera, y generar un impacto neutro.
Ello indica que integrar la sustentabilidad corporativa tiene beneficios para la sociedad y para el ambiente. A continuación, te presentamos algunos de ellos:
- Reputación corporativa: Crea una buena imagen para la empresa e incluso mejora sus relaciones con las partes interesadas.
- Acceso a más oportunidades: Contar con una empresa cimentada en la sustentabilidad corporativa permite acceder a proyectos innovadores con productos y servicios que demanda el mercado.
- Beneficios fiscales: De acuerdo con algunas legislaciones, tener una preocupación social y ambiental consolidada y demostrable pueden aplicar beneficios fiscales. Además, existen créditos que priorizan a las organizaciones que implementan esta herramienta.
- Acceso a mercados financieros: En el contexto del incremento de las finanzas sostenibles, tener empresas ambientalmente responsables supone mayores posibilidades de accedes a esos mercados financieros. Buscan empresas que tengan calificaciones ESG (ambientales, sociales y de gobernanza) más altas, como una forma de gestionar los riesgos. De igual forma, se puede acceder a concursos que se realicen dentro del ámbito público, recursos de capital y licitaciones de las Administraciones Públicas con la finalidad de construir un desarrollo sostenible.
- Mayor productividad: Las organizaciones que implementan esta herramienta cuentan con un personal más productivo que ayuda a lograr los objetivos empresariales, ya que están comprometidos con el propósito de la empresa.
- Consolidación empresarial: Tener en cuenta al entorno social, empresarial y ambiental garantiza una aceptación mayor de las partes interesadas.
La sustentabilidad corporativa implica un compromiso con la sociedad y el ambiente, un hecho que solo se va afianzar con el tiempo ¿Tu empresa está lista?
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